Madre del Cielo.
Madre de los Rocieros,
Madre de las Familias,
Madre de los necesitados,
Madre de los pecadores,
Madre de los que viven su Fe,
Madre de los Almonteños,
Madre y Señora de todos nosotros.
Salimos ya una año más a tu encuentro con el ardiente deseo de agarrarnos a tu reja y rezarte, y como no, de verte un año más el Lunes de Pentecostés en los brazos de tus hijos por la Aldea Almonteña.
Gracias Madre, Gracias